El Gobierno de Corrientes propicia una modelo de desarrollo forestal sustentable que se aplica en Canadá, Uruguay y Entre Ríos. Con ese objetivo visitó la provincia el ing. Christian Thivierge, asesor forestal de la Sociedad de Cooperación para el Desarrollo Internacional de Canadá (SOCODEVI).
El proyecto tiene como objetivo contribuir al fomento de una economía regional que brinde beneficios socioeconómicos a las poblaciones involucradas y fomentar un modelo de desarrollo forestal sustentable que vincule a los productores, trabajadores e industriales forestales, mediante la transferencia de conocimientos y tecnología. La concientización, capacitación y especialización en los distintos servicios que incluye la cadena productiva y comercial, son algunos de sus componentes más importantes.
En ese marco, una delegación integrada por Thivierge y los directores de Recursos Forestales, ing. Luis Mestres, y de Cooperativas, ing. Silvia Recalde, presentaron el modelo en Virasoro y en Santa Rosa. En estas dos localidades comenzará a ejecutarse el proyecto y en esta etapa se realiza un diagnóstico organizacional; es decir, detectar las instituciones decididas a comprometerse en el proyecto y los recursos humanos y estructurales disponibles para potenciarlos y fortalecer al sector forestal.
Existe la voluntad política de contratar un coordinador que se encargue de las actividades que conlleva la ejecución del proyecto, dijo Thivierge. Se trata fundamentalmente de contar con el apoyo oficial por la importancia de su rol en el proceso.
El Gobierno apoya esta iniciativa, porque Corrientes tiene lo necesario para desarrollar el proyecto, dijo el ing. Mestres; tenemos la madera, la industrialización y los recursos humanos. El proyecto apunta a apoyar lo incipiente, optimizar los procesos y mejorar los servicios que incluye la cadena productiva y comercial. Solo hay que comenzar a ponerlo en práctica, señaló.
Los beneficios económicos que se esperan son, entre otros, la validación de un modelo organizativo funcional y equitativo para el desarrollo forestal que brinde a la población la mayoría de los beneficios; generación de empleos especializados mediante la realización de trabajos forestales en las plantaciones, en el transporte y en la transformación de la madera; oferta de trabajadores especializados al mercado laboral; generación de una mayor rentabilidad sobre las inversiones forestables realizadas por sus propios productores; creación de un ambiente favorable para la inversión nacional y extranjera en la transformación de la madera.
Canadá implantó con éxito la experiencia en la década del ´80: Actualmente está integrada por 17 cooperativas y mutuales canadienses, cuenta con más de 1.800.000 socios, emplea a 25.000 personas y mueve un volumen de negocios de 8 millardos de dólares canadienses al año.