En los próximos días, las provincias de Chaco y La Rioja deben abonar en dólares servicios de intereses por bonos internacionales emitidos entre 2016 y 2017 y que fueron reestructurados en 2021, luego de entrar en default. El impacto de la devaluación en el pago de la deuda.
En el gobierno del ex Presidente Macri, luego de saldar la deuda con los holdouts con los que el Estado nacional estaba en conflicto, el mercado de crédito se abrió tanto para el gobierno nacional como para las provincias, lo que generó que diversos distritos acudan a ellos para buscar financiamiento en dólares que les permite desarrollar diferentes emprendimientos. En ese marco, la provincia del Chaco tomó USD 250 millones destinado a pagar deuda judicializada y para obras en el interior provincial, mientras que La Rioja tomó USD 300 millones para financiar el Parque Eólico Arauco.
El problema surgió tras la crisis cambiaria del 2018 y la recesión del 2019, profundizada luego con el estallido de la pandemia del Covid en el 2020. Ante ese escenario, el pago de deuda de las provincias estaba altamente condicionada, principalmente por el encarecimiento de la deuda producto de la devaluación, y muchas de ellas emprendieron procesos de reestructuración.
El Chaco primero entró en default mientras iniciaba las negociaciones con los bonistas, con quienes finalmente llegó a un acuerdo y concretó la reestructuración en el mes de junio de 2021. Por su parte, La Rioja, también en default, llegó a un acuerdo en septiembre de 2021. Ambos acuerdos tienen similares características: no tuvieron quita de capital pero se renegoció la tasa de intereses bajo un esquema step up y se alargó la vida del bono en cuestión, cuotificando los pagos de capital.
En ese contexto, en los próximos días ambas provincias deben pagar nuevos servicios de intereses. El Chaco paga su 5° servicio el día 18 de agosto y deberá desembolsar la suma de USD 8,5 millones. La Rioja, por su parte, paga el 4° servicio el día 24 de agosto cuando desembolse USD 10,3 millones.
El interrogante que surge de esta situación es como pagarán esas provincias los servicios correspondientes. Según datos del BCRA, al cierre del mes de junio del corriente año el Chaco tenía depósitos en dólares por USD 6,8 millones, necesitando entonces otros USD 1,8 millones para pagar el servicio mencionado. La Rioja, por su parte, disponía de USD 4,2 millones y por ende, necesita unos USD 6,1 millones para cubrir la totalidad del vencimiento.
Sin embargo, se especula que las provincias no usarán depósitos propios y recurrirán al Banco Central para hacerse de esas divisas, algo para lo cual no tendrán limitaciones. En junio de 2023, el Banco Central emitió una normativa estableciendo que las provincias podían pedir a esa entidad solo el equivalente al 40% de los vencimientos de deuda que afronten en dólares, pero esa limitación solo contempla los vencimientos de capital y no los de intereses. Por ende, tanto Chaco como La Rioja podrían acceder a las divisas necesarias en el mercado cambiario.
El problema que afrontan ahora estas provincias tiene que ver con la devaluación realizada el pasado lunes por el Gobierno nacional. Tras esa medida, el dólar mayorista saltó un 22%: el viernes 11 de agosto cerró en $ 287,29 y el lunes 14 de agosto abrió a $ 349,98. Esa medida, naturalmente, encarece el acceso a los dólares para las provincias.
Tomando el nuevo valor del dólar mayorista del Banco Central, el Chaco debería desembolsar $ 2.987,8 millones para hacerse de los dólares necesarios para afrontar su servicio de intereses del bono internacional; el extra que debe pagar por la devaluación realizada es de $ 535,1 millones. La Rioja, por su parte, deberá pagar $ 3.621,8 millones, unos $ 648,7 millones más que al precio del dólar mayorista previo a la devaluación.
Cabe señalar que el Chaco ya había emitido el aviso de pago en la semana previa a la devaluación, mientras que La Rioja lo hizo luego de la medida.