La mayoría de las economías regionales terminaron “en crisis” el 2023: solo se salvan la yerba mate y el maní, según el reporte mensual de Coninagro.
La Confederación Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO) presentó el “Semáforo de Economías Regionales” correspondiente a noviembre, donde reveló una tendencia estable con respecto a los meses anteriores: 2 actividades “en verde”, 5 “en amarillo” y 12 “en rojo”, lo que refleja una situación previa a la devaluación del dólar oficial.
El mes de análisis dejó un claro contraste entre ganadores y perdedores. Solamente dos actividades cerraron el mes en “verde” y una de ellas es la yerba mate (la otra es el maní), que muestra un panorama alentador. Con un crecimiento del 2,5% en comparación con el año pasado, el consumo interno alcanzó niveles récord, siendo el más alto de los últimos cinco años según estadísticas del Instituto Nacional de la Yerba Mate.
Por otro lado, actividades como algodón, miel, vino y mosto, granos y leche muestran una situación concreta de crisis, atribuida a un mercado estancado, sequía persistente y costos elevados a lo largo de 2023.
En tanto, algunas actividades se encuentran en una posición intermedia, saliendo de las urgencias pero aún enfrentando incertidumbres hacia el futuro. Entre ellas, se destacan arroz, aves, cítricos dulces, forestal, mandioca, ovinos y tabaco, que, aunque muestran signos de mejoría, todavía no han superado por completo los desafíos que enfrentaron.
Por último, bajo el signo de la advertencia se ubican los bovinos, hortalizas, papa, peras y manzanas, y porcinos. Estos sectores requieren especial atención y medidas para afrontar las complejidades del entorno económico y productivo, por que la entidad remarcó la necesidad de políticas que impulsen la recuperación y estabilidad en estas áreas clave para la economía del país.