UNGE cultivos sostenibles es el primer emprendimiento de este tipo en el país, ubicado en Sañogasta, departamento de Chilecito en La Rioja. Es una empresa argentina dedicada a la producción de flores de cannabis con fines medicinales que busca abastecer una industria transformadora y en constante crecimiento mediante procesos productivos, eficientes y sostenibles con el fin de promover la salud, el bienestar y una mejor calidad de vida.
Es una finca de 8 hectáreas, distribuidas en 6 hectáreas de nogales y poco más de dos hectáreas dedicadas al cultivo experimental de cannabis medicinal, aún en etapa de investigación y desarrollo, un ecosistema inmerso en el valle de Miranda, en la localidad de Sañogasta, 20 minutos al oeste de la ciudad de Chilecito.
“Somos una empresa Argentina dedicada a dos grandes unidades de negocios. La producción e investigación de inflorescencias de Cannabis Sativa L. con fines medicinales y el desarrollo del turismo cannábico de experiencia“, detallaron desde la empresa.
La propuesta incluye un recorrido guiado a lo largo del proceso de producción, con información detallada sobre cada etapa, y la posibilidad de hacer senderismo por caminos que atraviesan el bosque de nogales hasta puntos panorámicos en altura, sobre la Cuesta de Miranda. Una vez finalizada la visita al campo de cultivo, los visitantes pueden disfrutar de su cocina de fuegos y coctelería de autor, rodeados de naturaleza y acompañados por el maravilloso entorno del valle.
Desde Unge SA, enfatizaron: “Formamos parte del desarrollo de una industria en pleno auge, generando impacto positivo en varios entornos, lo cuál nos convierte en una empresa de triple impacto. Como lo son el económico, social y ambiental.”
La empresa logró un triple impacto en la industria. En lo económico, la industria del cannabis medicinal se encuentra en constante expansión, lo que genera empleos y oportunidades para las economías regionales del norte grande. “UNGE impacta directa y positivamente en la captación de inversiones para la región, siendo una empresa eficiente que invierte en I+D de manera constante apostando al desarrollo de una industria pujante”, precisaron.
El impacto ambiental se explica porque la producción y cultivo de cannabis medicinal puede tener un impacto significativo en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, absorbemos positivamente el Co2. Además, el uso de técnicas de cultivo sostenible y la adopción de prácticas ecológicas mejoran la calidad del aire, la remediación de suelos y del agua, reduciendo así el impacto ambiental negativo.
Sobre el impacto social, destacan desde la empresa que el cannabis medicinal puede contribuir a mejorar la salud de las personas que padecen diferentes enfermedades, ya que el uso de este tipo de cannabinoides puede aliviar algunos síntomas y dolores asociados a diversas afecciones. En ese sentido, detallaron que desde la firma buscan “contribuir a la educación y la conciencia sobre los beneficios y los usos del cannabis medicinal.”
La idea del turismo cannábico, se desarrolló pos del auge del turismo de experiencia en contacto con entornos naturales. Bajo esa premisa, desarrollaron la idea de un centro de cultivos con recorridos turísticos, fusionado con un espacio gastronómico y recreacional.
“Tenemos más de 10 años de experiencia en el desarrollo de marcas gastronómicas en la provincia de Córdoba, pizzerías, marcas de fast food, asian food, cocinas de fuegos, entre otras. Uno de esos casos de éxito se encuentra en un corredor turístico de las Sierras Chicas, más precisamente en el Camino del Cuadrado de Río Ceballos“, referenciaron.